El
fotoperiodista barcelonés, Alfons Rodríguez comenzó
su andadura en esto de la fotografía a mediados de los 90.
Desde entonces es un trabajador incansable. Viaja por todo el mundo
con su cámara para mostrarnos sus maravillas y también
sus miserias. Es autor de espléndidos reportajes publicados
en las más prestigiosas revistas como Nacional Geographic
Magazine o Geo. Pero sin duda lo que más le caracteriza
es su humildad a la hora de hablar de su trabajo. Esa humildad, como
él mismo, dice se la ha aportado ‘las vivencias en más
de 75 países y más de dos décadas de viajes’.
Sus fotografías poseen una belleza serena e infinita, pero
con un claro enfoque social y humanitario, refleja experiencia y saber
hacer, ya que el fotorreportaje de este tipo no es precisamente el
más fácil.
Alfons Rodríguez forma parte de proyectos como La
Caja Azul y es cofundador de Gea
Photowords, imparte, diversos talleres y clases sobre temas
referentes al fotorreportaje, colabora como freelance para
medios nacionales e internacionales, y es autor de varios libros.
Ha recibido el premio REVELA y el Premio Nacional de reportaje Social
2010.
- ¿Cuál es tu primer recuerdo de lo que significa
esta aventura de ser fotógrafo? ¿Cómo te surge
esta pasión y te profesionalizas?
Desde los 17-18 años que viajo, más
de 25 años rompiendo botas. Era mi pasión contenida hasta
que tuve edad para hacerlo. Conocer este mundo ha sido siempre una de
mis prioridades. La fotografía entró en mi vida cuando
era adolescente y no tardó en integrarse en mi otra pasión:
los viajes, otras culturas, otras realidades diferentes a la mía.
Con la fotografía comprobé que se podía expresar
todo aquello, explicarlo a los demás, a mi regreso. Mi mirada
era la proyección de mis pensamientos y mis experiencias al exterior.
Más tarde aprendí que el mundo era tan bello como
cruel, a veces al mismo tiempo. Contar historias bellas y esperanzadoras
o tristes y horrorosas. Entonces me hice fotógrafo profesional.
Era mi destino vivir de aquel modo. Hasta hoy en día. Hasta el
final.
Recuerdo que decidí hacerme
profesional y tomar el camino del fotoperiodismo, a mediados de los
90, cuando viajaba desde Calcuta a Barcelona por tierra. Un largo viaje
cargado de experiencia vital. Intensísimo. Aunque lo más
probable es que la decisión sólo fue seguir mi destino
.
- ¿Un buen fotógrafo
ve lo que para el común de las personas pasa desapercibido como
dijo Alberto Schommer?
Yo no sería tan prepotente como
Schommer!!!. Creo que los fotógrafos somos personas comunes.
Hemos desarrollado una sensibilidad determinada que se manifiesta a
través de nuestra mirada. La fotografía es la mirada del
fotógrafo. Nada más. Es subjetiva, se diga lo que se diga.
Si es mi mirada, mi fotografía, es que está interpretada
por mi. Aunque cuente una realidad como el caso del fotoperiodismo.
Hay que tener en cuenta que esa mirada
se agudiza y se afila con el tiempo y la experiencia, tal vez eso si
que nos difiere de otras personas. Pero ser diferente no tiene que significar
ser especial. Un mecánico arregla coches y yo no soy capaz de
hacerlo: somos diferentes pero no uno mejor que el otro por esa circunstancia
.
- ¿Cuál es la idea perfecta de una fotografía,
su secreto? ¿Qué es lo que más valoras de una imagen?
El momento decisivo. Eso lo conforma todo en una imagen. Lo que transmite
y cómo lo transmite. La luz, el punto de vista, el encuadre,
la composición, todos elementos del instante decisivo. Es mi
opinión que seguro que coincidirá con la de muchos otros
fotógrafos.
- La fotografía, ¿mejora con el tiempo o es uno de esos
raros oficios no sujetos al darwinismo?
Puede evolucionar, efectivamente, tanto a nivel visual como de transmisión
de mensaje. Creo que puede ser debido a que las personas cambiamos con
el transcurso del tiempo y por tanto cambia nuestra percepción
de lo que nos rodea, de las imágenes en este caso. Otra cosa
es que pueda mejorar o empeorar, ambas circunstancias son posibles.
- ¿Qué ha supuesto
la digitalización para la fotografía? ¿Han cambiado
los ojos del fotógrafo?
No lo creo. La esencia de la fotografía, que es la mirada y la
sensibilidad del fotógrafo, no ha cambiado, es la misma. Tal
vez esa esencia evoluciona con el propio ser humano pero no con la técnica.
La fotografía digital vino para quedarse y ahora ya es algo normal.
Las nuevas generaciones no se plantean (en general) que es un rollo
de Fujichrome Velvia. Cómo yo no pensé nunca en trabajar
con Daguerrotipos.
- Has realizado infinidad de reportajes a lo largo y ancho del mundo,
¿cuál consideras tu mayor logro?
Lo aprendido en el camino. Los valores que he ido integrando en mi registro.
Ahora, al menos, ya sé que no sé nada, como dijo Sócrates
y eso me hace humildemente sabio.
- ¿Cuál es tu lema?
Los pies y los ojos en la Tierra y, sin dañar a nadie,
vivir cada día como si fuera el último. No siempre lo
consigo.
- ¿Y tu rasgo más
característico?
Soy un realista soñador. ¿A qué parece contradictorio…?
-Cómo te sientes al otro lado de la cámara, ¿cómo
se ve el mundo a través de tu objetivo?
Me siento protegido en ocasiones y
muy vulnerable en otras. Depende de la situación en que esté
trabajando, la cámara puede ser un escudo emocional muy potente
pero eso tiene sus riesgos éticos.
A través de mi objetivo
intento ver un mundo real, aunque no puedo evitar hacerlo de forma subjetiva.
Veo un mundo lleno de carencias pero maravilloso a la vez. Son dos realidades
entrelazadas e indisolubles.
-¿Qué fotografía
te gustaría hacer?
Me gustaría hacer una foto en
que se viera a dos seres humanos muy distintos en rasgos étnicos,
sociales y culturales, incluso religiosos, abrazándose. Como
símbolo de paz, libertad e igualdad. Me gustaría fotografiar
el fin de una guerra, la sonrisa de un niño o el fin del peligro
de extinción de los tigres. Captar el momento en que se consiga
la vacuna contra la malaria o captar los árboles crecer sin amenazas.
Es utópico, lo sé, pero es que soy un realista muy soñador.
Ya te lo dije antes.
Nota: Quiero expresar mi agradecimiento
a Alfons por su paciencia, por su rápida respuesta y por compartir
sus increibles imágenes.
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DATOS
DE LA AUTORA:
Susana Hermoso-Espinosa García (Málaga,
España) es licenciada en Historia del Arte por la Universidad
de Málaga, y Master en Museología por la Universidad de
Granada. Tiene una amplia experiencia profesional en diversas instituciones
y empresas culturales. Directora de la Revista Científica
de Estudios Histórico Artísticos SUMA. Es fundadora
y codirectora del portal de Arte y Cultura Homines.com.
