Marc Montijano (n. 1978) es un artista
multidisciplinar que comienza a muy temprana edad a dar sus primeros
pasos en el mundo de la pintura gracias a su padre, Miguel Montijano,
pintor de profesión. Poco a poco busca su propio camino, primero
en una pintura figurativa, con reminiscencias expresionistas, para desembocar
más tarde en la abstracción bajo una visión muy
personal que traspasa pronto el lienzo, volcando su característico
universo en performances, instalaciones, fotografías y esculturas.
Rechazo de lo artificioso, sencillez, cuerdas, sacos, desnudos, espiritualidad,
anhelo de cambio. Su obra nos invita a despertar, recapacitar y pensar.
Actualmente está realizando una serie de doce performances en
el CAC
Málaga, un trabajo con el que está cosechando
un gran éxito.
- Ya sabemos un poco de tus
inicios, pero ¿cuándo y cómo empezaste a verte
a ti mismo como artista?
Siempre he tenido un lápiz en la mano, me he pasado la vida dibujando,
pero fue a partir del año 2002 cuando paulatinamente me voy apartando
del resto de actividades y comienzo a concéntrame únicamente
en el arte.
- ¿El artista tiene que reinventarse cada día,
en cada obra?
Debe sentirse satisfecho con cada obra,
algunas son buenas y otras no tanto, pero todas sirven para aprender
y seguir avanzando.
- En el Arte no hay una guía ¿cómo sabes lo próximo
que debes hacer?
Me dejo llevar por lo que siento. Cuando no me siento cómodo,
a gusto con lo que hago y con el contexto, más pronto que tarde
acabo pasando página. Me aburro muy fácil de las cosas
que no me estimulan.
- ¿Cómo se lleva
a cabo una serie y qué te inspira a la hora de elegir los temas?
Elijo los temas que me preocupan, expongo mis sentimientos. Busco reflejar
mis ideas, el modo que tengo de entender la vida. A partir de esa base
comienzo a profundizar y me dejo sorprender por el destino.
- En todo tu trabajo hay un fuerte denominador común, tienes
un lenguaje singular y reconocible ¿Eso cómo se consigue?
Todas mis obras comparten una misma base. Estoy interesado en lo sencillo,
en la pureza, intento que la arquitectura compositiva de la obra se
sostenga utilizando los elementos mínimos. Hay cosas a las que
se llega por evolución, otras experimentando y algunas por casualidad,
pero todo se consigue trabajando. Por ejemplo, el hecho de emplear cuerdas
en mis obras, lo incluyo por primera vez cuando estaba agonizando la
serie Retratos
del Alma, a finales de 2005, y poco a poco las cuerdas
van tomando protagonismo hasta convertirse en uno de los elementos principales
en todas mis obras y más característicos, casi como mi
firma.
- Tu trabajo siempre invitas al espectador a la reflexión.
Háblanos de lo que quieres transmitir ¿cuál es
tu mensaje?
Depende de la obra, pero hay ciertos puntos básicos que se repiten.
Mi trabajo es el reflejo de un proceso de búsqueda interior,
intento exponer mis ideas, el modo que tengo de entender la vida. Me
interesa hurgar en los sentimientos, en las sensaciones, me atrae lo
que guardamos en nuestro interior, los recovecos del hombre. El tema
de fondo que impregna y origina mi obra es la relación del ser
humano y la sociedad actual. Me perturba el hombre embrutecido. Creo
que vivimos en una sociedad que está muy confusa, sin valores
morales y con sus prioridades totalmente deformadas. Nos falta sencillez,
reflexionar sobre lo básico y pensar realmente si vamos a donde
queremos ir o estamos viviendo la vida que nos han marcado otros.
- ¿Cual de tus trabajos
es el que más te gusta?.
No hay una único trabajo, pero
en conjunto me siento muy orgulloso de toda la serie Crucifixión
por lo que significa, es el comienzo de todo con mayúsculas,
hasta entonces, no eran dueño de mi propio camino. A partir de
Crucifixión tomo las riendas.
- Algo que muchos nos preguntamos ¿cómo ves el mercado
del arte? ¿Cómo defines su situación actual?
La palabra mercado del arte, no me gusta nada, pero describen
a la perfección el estado del arte y la cultura actual. Es un
gran mercado. Un artista hoy en día tiene que saber jugar con
las reglas de la sociedad de consumo, no con las del arte, para tener
éxito (prensa, publicidad, imagen, producto).
El arte es un componente más de la sociedad y adolece de sus
mismos males, por tanto el arte que triunfa ahora es humo, es más
envoltorio que contenido, es puro marketing, la mayoría de las
veces sin esencia y de una calidad más que dudosa. Eso no significa
que no haya buenos artistas, los hay y muchos, pero generalmente no
están arriba, no son los que están batiendo récords
de ventas. Con las obras de arte ocurre como con una bolsa de patatas
fritas, no compramos la de mejor calidad, compramos la que tiene un
envoltorio más llamativo, la que está mejor ubicada en
el supermercado o la más anunciada en televisión.
- Y para
terminar, a parte de la serie de performances en el CAC Málaga,
¿cuales son tus próximos proyectos?
En estos momentos estoy terminando
de preparar una exposición para la galería La
CasaRosa, que tendrá lugar este otoño.
Además tengo prevista para dentro de unos meses dos performances,
una en Madrid y otra en Cáceres, y estoy ultimando un proyecto
artístico-social llamado Castigados.
_______________________
Para
saber más
__________________________
DATOS
DE LA AUTORA:
Susana Hermoso-Espinosa García (Málaga,
España) es licenciada en Historia del Arte por la Universidad
de Málaga, y Master en Museología por la Universidad de
Granada. Tiene una amplia experiencia profesional en diversas instituciones
y empresas culturales. Directora de la Revista Científica
de Estudios Histórico Artísticos SUMA. Es fundadora
y codirectora del portal de Arte y Cultura Homines.com.
