SANA
ADVERTENCIA.
Antes de leer este artículo, se recomienda haber visualizado
previamente la película con atención y devoción.
Si no fuera así, el amante de las sorpresas y el suspense me
dispararía con su recortada para después colgarme del
mástil más alto y lanzarme erizos de mar. Bien es cierto
que el que finalmente decide es el lector. El poder es suyo, señoritas.
La libertad es suya, caballeros. Ahora que ya conocen el contexto, hagan
lo que les plazca.
'KIDS'
(Kids)
Director:
Larry CLARK
Guión: Larry CLARK, Harmony KORINE y Jim LEWIS
Productor: Cary WOODS y Cathy KONRAD
Productor ejecutivo: Gus Van Sant
Música original: Low Burlow, John Davis y Beastie Boys
Fotografía: Eric Alan Edwards
Montaje: Cristopher Telefsen
Interpretes: Leo Fitzpatrick (Telly), Justin Pierce (Casper),
Chloë Seighy (Jenny).
AÑO: 1995
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TELLY:
¿Qué hay tronco?
CASPER: Joder tío, ¿como ha ido?
TELLY: Adivínalo.
CASPER: ¿Te la has follado? Si no tenía más
de doce...
TELLY: ¿Y quien soy yo? El hijo puta cirujano de vírgenes
CASPER: ¿Qué tal el polvo, tío?
TELLY: De puta madre, tío. Esa chica sabe follar.
CASPER: ¿Seguro que sabe follar?
TELLY: Pues si, iba por la mitad y pensé: "Esta cría
no es vírgen, no follaría así si lo fuera".
CASPER: ¿Seguro que era vírgen?
TELLY: Pues claro. Esa perra sangraba, tronco. Cuando se la metí
se puso a gritar y eso. Creo que la ví morder la almohada,
pero no estoy seguro.
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Atrevimiento
y controversia. Fueron las dos palabras utilizadas por la revista 'Vanity
Fair'para calificar KIDS, la polémica película que estrenaba
el reputado escritor Larry Clark en 1995 y que pronto se convertiría
en un icono del buen cine independiente norteamericano. El film bebe
de las fuentes del mejor cine social de los 90, con Spike Lee y Ken
Loach como claros referentes, y combina la trama narrativa con el retrato
costumbrista de una época (los 90), de un lugar (Nueva York)
y de una generación, los adolescentes, como Telly, Casper y otros
cuantos personajes más. Es su historia la que se cuenta, sin
ignorar el propio conflicto que ésta genera entre ellos. La fotografía,
firmada por Eric Alan Edwards, aporta un indispensable realismo que
envuelve cada fotograma con gran versatilidad a la hora de afrontar
escenas de cama o iluminación en discotecas. La estética
ha sido asumida por films más recientes de innegable influencia
como la americana 'Thirteen' o la sueca 'Fucking Amal'. Ambas también
muy recomendables.
KIDS no es una película para niños. KIDS es una película
de niños que se creen hombres, de adolescentes que se creen invencibles,
de amantes que no temen al contagio. Personajes abstraídos, confundidos,
muy bien interpretados pero atrapados en unas esferas bien diferenciadas:
la de los chicos y la de las chicas. Será en su eterna conjunción
cuando las amarras se tensen, cuando las consecuencias sean irreversibles,
cuando ya no se pueda hacer nada para evitar la caída.
Al
ritmo de la música de los Beastie Boys los personajes desfilan
por la ciudad. Telly y Casper son dos púberes que sólo
piensan en drogarse y en follarse a cuantas más tías mejor.
Los dos son muy buenos en esta última materia: han desarrollado
algo así como una doble personalidad, amable, educada, seductora,
cínica, que susurra a las chicas justo lo que necesitan oír
para que éstas se abran de piernas. Telly posee una confesable
afición: le encanta desvirgar jovencitas. Llega a decir que conseguir
que le chupen la polla a uno es muy fácil, pero que desvirgar
mujeres es de campeones porque cuando te mueras a los 50 todas las vírgenes
a las que desvirgaste llorarán tu muerte. No le gusta usar condón
porque le aprieta o se le rompe, una costumbre que comparte con su amigo
Casper que también pasa de las gomas.
Por otro lado las chicas también hablan de sus cosas. Una de
ellas, Jenny, se queja porque ha sido utilizada por Telly. Le robó
la virginidad y nunca más la volvió a llamar. El mundo
está lleno de cabrones, comentan. Sus amigas le recomiendan que
no piense en ello, porque la primera vez con un tío siempre es
una mierda y que tiene suerte de no haber perdido la virginidad en el
asiento trasero de un coche. Que al menos lo hizo en una cama. Y todo
esto por la mañana, porque es así como comienza el día;
las vertiginosas 24 horas que narra la película en sus 85 minutos
de metraje.
Los
diálogos emergen de la verosimilitud tan absoluta que Larry Clark
quería darle a la historia. El estilo callejero, de barrio, salpicado
de palabros e impertinencias prepotentes con dos o tres temas standard
de los que hablar, pero de una claridad absoluta. El propio director
argumentaba esta idea: 'Ahora, las relaciones entre chicos y chicas
han cambiado muchísimo. He notado que tan sólo la manera
en que un chico le habla a una chica ya ha cambiado. Lo dice todo abiertamente.
Todo el lenguaje está ahí fuera. Hay todo un intercambio,
un lenguaje sexualmente explícito que puede llegar a ser chocante
para las generaciones de gente mayor, pero en realidad se trata de bromas
amistosas entre los chicos y las chicas, un tipo de interacción
que es perfectamente natural para los chicos de hoy'. El casting elegido
para encarnar a los protagonistas no era profesional y para todos era
su primer trabajo. Clark supo dotar de presencia en la pantalla a aquellos
'primerizos'que por otra parte, dieron con creces el talento y naturalidad
que la película necesitaba.
El detonante de la trama vendrá marcado por una noticia. La que
recibe Jenny en el hospital cuando se entera de que ha dado positivo
en su prueba del VIH. Ella sólo se había acostado con
un chico, con Telly, y ahora tiene el sida. En cambio, su promiscua
amiga que nunca usa protección ha dado negativo. Puede o no puede
pasarte, pero si pasa atente a las consecuencias. Sin el uso del condón,
el contagio del sida no es del 100%, pero sólo basta con una
vez para que se produzca el contagio. Jenny echa a correr por las calles
de la ciudad de Nueva York, en plena crisis existencial que la sume
en una profunda confusión y tristeza. Se hará suya la
misión de encontrar a Telly y contarle que ha sido él
quien le ha contagiado el sida y que, por tanto, que él también
lo tiene.
Por su parte, Telly tiene una nueva chica en mente. Será la elegida
para la fiesta de despiporre programada para la noche. Mientras tanto,
se pasa el tiempo con su inseparable Casper - the friendly ghost - robando
en un establecimiento chino, comprando hierba de la buena en el parque
para fumársela posteriormente con sus colegas en la cancha de
baloncesto. Un infortunado tropiezo de Casper con su monopatín
originará una batalla campal poco equilibrada. Casper y los amigos
de Casper contra el pobre negro que se atrevió a vacilarle. Resultado:
negro humillado, apaleado, ensangrentado, retorciéndose en el
suelo. Sin embargo, estos chicos carecen de sentimiento de culpa. Eso
es para los débiles. Se enfundan en sus chandals y preparan sus
cuerpos para la brutal fiesta de la noche.
Es
en este escenario donde se desarrollará todo el tercer acto y
el clímax que encumbrará la historia. Después de
una sesión de juegos sexuales en la piscina, los chicos y las
chicas se drogan sin escatimar en gastos. Las drogas que saltan a la
palestra son variadas: desde porros y cervezas hasta la exquisitez del
popper. Sodoma le mete mano a Gomorra en una fiesta de deseo carnal
irrefrenable. Allí estará por supuesto Casper, y también
Telly que ha conseguido que su 'elegida' le acompañe a la fiesta.
Pero la fiesta enseguida da visos de agotarse en sí misma. Los
niños terminan alelados tras unas caladas y los adolescentes
resisten poco tiempo más. En poco tiempo no quedará ninguno
en pie. El alcohol y el resto de sustancias han hecho su efecto. Para
Telly la fiesta aún no ha terminado y conduce a su virginal víctima
hacia el cuarto de los padres del dueño de la casa. A sus pies,
decenas de cuerpos de adolescentes, inertes, semi-desnudos, se entrelazan
unos con otros. Una vez en la cama, Telly lleva a cabo su conocida táctica
para conseguir que la chica se muestre abierta a sus deseos. ¿Llegará
a tiempo Jenny a la fiesta para impedir que Telly contagie a una nueva
chica? Larry Clark lo tenía claro desde el principio: por supuesto
que no.
Jenny ha vagado durante todo el día por la ciudad buscando a
Telly, pero no lo ha encontrado. Finalmente, tras ingerir éxtasis
en una discoteca, se entera que el chico se halla en la fiesta de una
casa cercana. Se desplaza hasta allí, donde encuentra a Casper
en la bañera, completamente borracho, con un amigo inconsciente
lleno de vómito. ¿Dónde está Telly?, le
pregunta Jenny. ¡Está desvirgando a una puta! - le responde
Casper riéndose de ella. Jenny se desplaza por entre los cuerpos
de los borrachos hasta que llega al cuarto del que nacen los jadeos.
Abre la puerta y se encuentra con lo que esperaba: Telly encima de su
'elegida'haciéndole el menor daño posible en el frenético
vaivén del sube y baja. Sin mirar, Telly ordenará a la
intrusa que cierre la puta puerta. Jenny la cerrará e irá
a dormitar al sofá, sin saber qué hacer en su desesperación.
La portentosa secuencia acabará fundiendo en negro.
Casper se dará cuenta de que su amigo Telly ha follado y él
no, un hecho que atenta directamente contra su ego. Cuando descubre
a Jenny en el sofá no podrá reprimirse y ni corto ni perezosos
acabará violándola. Todo un acto poético de justicia
cósmica, en el que al final los malos acaban pagando por sus
pecados. En un momento de la película, uno de ellos afirma que
lo peor que podría pasarle sería no poder follar. E indirectamente
es lo que les ocurre. Tanto Telly como Casper pagarán un precio
demasiado alto por sus febriles acometidas, un precio que todavía
no conocen porque ni siquiera saben que tienen que pagar. Los dos ignoran
que han contraído el sida y con ese desconocimiento termina la
película. Al otro lado de la cama quedan las chicas engañadas,
contagiadas y que tampoco lo saben. Sólo Jenny, sólo Jenny.
Muchos de los participantes en el film vieron como sus carreras comenzaron.
El personaje de Jenny fue interpretado por ChloË Sevigny, que ha
participado posteriormente en producciones de la talla de 'Dogville'
o 'Boys don´t Cry' por la que ganó el Globo de Oro y fue
nominada al Oscar. Su amiga promiscua, Rosario Dawson, fue descubierta
por Larry Clark mientras esperaba el autobús en una parada de
Manhattan y la incluyó en su primera película. Spike Lee
vio la cinta y le ofreció un personaje mucho mayor en 'Una mala
jugada'. Rosario Volvería a trabajar con él en la magnífica
'25th hour' (La última noche) protagonizada por Edward Norton.
Por su parte, Leo Fitzpatrick fue el elegido para el papel de Telly
después de que Clark lo observará también por Manhattan
montando en monopatín y lo reclutara para el film sin ninguna
experiencia previa. Trabajó de nuevo con Larry Clark en sus films
'Bully' y 'Al final del Edén' y en la última película
de Todd Solonz 'Storytelling' en el año 2001. La nota negativa
la puso el actor que daba vida a Casper, ya que después de varias
películas sin demasiada repercusión acabó pegándose
un tiro en la habitación de un hotel. Larry Clark también
lo había descubierto en su monopatín por las calles de
Nueva York cuando ya era un adolescente problemático. El director
siguió haciendo películas comprometidas y de denuncia
como demostraría en su último trabajo y más maduro
hasta la fecha: la provocadora y también de trama adolescente
'Ken Park'.
RESTO FILMOGRAFÍA: