El
director alemán ,Marc Forster, posee una filmografía
interesante que abarca varios géneros que ha sabido manejar
con solvencia: el drama descarnado en 'Monster‘s Bal”
(2001), el mundo de lo imaginario con 'Descubriendo nunca jamás'
(Finding Neverland/2005) y el thriller psicológico en 'Tránsito'
(Stay/2006). Con 'Más extraño que la Ficción'
(Stranger than fiction), su última película, aborda
la comedia dramática con acierto, generando una historia que
nos plantea preguntas existenciales a la vez que nos proporciona una
buena dosis de entretenimiento. Sin duda un film interesante, excelentemente
realizado y que nos demuestra que estamos ante un director que no
tiene miedo de afrontar diferentes retos cinematográficos,
lo que además hace con soltura y resaltante factura para dar
a luz películas que vale la pena ver y comentar.
Los
diferentes mundos de Forster
Nacido en Alemania y criado en Suiza, Forster llegó a los Estados
Unidos en 1990 para estudiar en NYU film school. En el año 2001,
la crítica quedó gratamente sorprendida con ‘Monster`s
Ball’, su segunda película, un drama intenso que
planteaba la relación transformadora entre dos seres humanos
aparentemente opuestos: un ultraconservador y racista empleado del corredor
de la muerte, intransigente y violento con su hijo y una mujer de color
que acaba de perder a su marido en la silla eléctrica. Sin ser
un film sensiblero toca los temas de la necesidad de afecto y la búsqueda
de redención de una manera tan cruda y poética a la vez
que logra conmover totalmente al espectador, de hecho el desgarrador
performance de Halle Berry le proporcionó un Oscar a mejor actriz
dramática.
En 2005 presentó su obra ‘Descubriendo Nunca Jamás’,
con un soberbio reparto que incluía a Johnny Deep como el famoso
dramaturgo escocés J.M. Barrie y a Kate Winslet como una madre
dedicada a sus hijos. Será a través de la profunda relación
que el autor establece especialmente con los niños de la familia,
empleando todo tipo de historias fantasiosas para divertirlos, que el
creador encontrará el camino a su obra cumbre Peter Pan. Un film
muy humano y lleno de ingenio que logra captar el mundo infantil tanto
en sus asperezas como en sus maravillas así como la fascinante
mente del famoso escritor.
En el 2006 Forster dejó a todos sin habla con la intrigante ‘Tránsito’,
otra vez con un reparto de lujo con Ewan McGregor, Naomi Watts, y Ryan
Gosling, implicados en un intrincado laberinto que quizás solo
sea el sueño de un joven moribundo que en su estado entre la
vida y la muerte logra captar elementos del destino. La película
nos introduce en un terreno interesante pero espinoso, donde el límite
con lo cotidiano se desconoce, se asoman conceptos de existencias paralelas,
imágenes oníricas, la insinuación de que todo en
la vida esta extrañamente conectado, así como un cuestionamiento
interesante acerca del destino. Sin duda un film complicado pero atrevido,
provocador y por sobre todas las cosas visualmente impactante y artístico
al que quizás no vale la pena buscarle una explicación
única porque esta lleno de pequeñas y múltiples
preguntas sobre la veracidad de la ‘realidad’ que habitamos
y no da respuestas precisas como si su cometido fuera despertar la mente
del espectador para que sea este el que las busque. A mi criterio esta
es una de las películas más interesantes de este director.
Más extraño
que la ficción: un nuevo terreno.
FICHA
TÉCNICA DE MÁS EXTRAÑO QUE LA FICCIÓN
+
Dirección: Marc Forster.
+
País: USA.
+ Año:
2006.
+ Duración:
113 min.
+
Género: Comedia dramática.
+ Interpretación:
Will Ferrell (Harold Crick), Maggie Gyllenhaal (Ana), Dustin Hoffman
(Jules Hilbert), Queen Latifah (Penny Escher), Emma Thompson (Karen
Eiffel).
+ Guión: Zach Helm.
+ Producción:
Lindsay Doran.
+ Fotografía:
Roberto Schaefer.
+ Montaje:
Matt Chessé.
+ Vestuario:
Frank Fleming.
+ Música:
Britt Daniel y Brian Reitzell.
+ Diseño de producción:
Kevin Thompson.
Sin duda se trata de un film muy original y bien llevado que trata sobre
una novelista Karen Eiffel (Emma Thompson) que está a punto de
completar su último y potencialmente mejor libro, luego de años
de trabajo. El desafío que le queda es pensar cómo matar
a su personaje principal, Harold Crick. Lo que no sabe es que Harold
Crick (Will Ferrell) está inexplicablemente vivo en la vida real,
y, de repente, es consciente de sus palabras. El protagonista comienza
a escuchar una voz en off que narra lo que siente y piensa e inclusive
le anticipa el futuro. Al principio cree que está al borde de
la locura y consulta a un psiquiatra que le dice que sufre de esquizofrenia,
pero Harold está totalmente convencido que la voz que escucha
es real y emprenderá la búsqueda de la autora para tratar
de cambiar el final que es la crónica de una muerte anunciada.
Para ello buscará la ayuda de un profesor de literatura Jules
Hilbert, muy bien interpretado por Dustin Hoffman, quien intentará
acompañarlo en descubrir quien es la misteriosa escritora cuyos
designios literarios van guiando la vida de Harold para así poder
cambiar el trágico final.
Lo interesante no es solo la premisa original, sino el viaje que emprende
Harold, un tipo con una vida gris, sin amigos, sin diversiones, sin
imaginación, que vive absorto en sus pequeñas y obsesivas
rutinas y dedicado a su trabajo. A partir que nuestro héroe empieza
a escuchar la voz de la escritora sus costumbres cambian radicalmente
y no tardan en llegar los cuestionamientos acerca de su vida, la búsqueda
de significados, las preguntas existenciales. En definitiva se trata
de un hombre que se siente condenado a morir sin saber como evitarlo
y es esa realidad la que lo confronta con la vacuidad de su vida actual.
El film trata varios temas interesantes como el estancamiento creativo
de la autora del libro que ante su impotencia comienza a obsesionarse
cada vez más con terminarlo dando vueltas en círculos
desesperados de ansiedad. Por otra parte se analiza a un individuo preso
de sus hábitos que encubre lo que en realidad le gustaría
hacer. Es un film con un toque metafísico, que se enriquece de
buenos diálogos y situaciones que escapan de las producciones
bobaliconas típicas de las comedias dramáticas.
Con
un planteamiento visual fascinante y minimalista, el film nos lleva
por un viaje imaginario en el cual es imposible no involucrarse emocionalmente
con los personajes. El reparto es casi perfecto, incluyendo (quién
lo diría) a Will Ferrell, que se aleja de su lado estúpidamente
cómico para brindarnos una actuación creíble y
profunda. Sin embargo creo que la película hubiese tenido más
fuerza con otro actor principal de mayor carácter dramático.
Por su parte Emma Thompson esta soberbia como la neurótica escritora
y Dustin Hoffman hace un trabajo impecable. Completan el elenco dos
secundarias de lujo que hacen lo suyo al hilo: Queen Latifah y Maggie
Gyllenhaal.
Sin duda hablamos de una buena película, realizada por un cineasta
atrevido, que no se encasilla y va probando nuevos géneros. Se
trata de uno de los directores más interesantes de los últimos
tiempos, que ha demostrado con su filmografía que no sólo
tiene un manejo estupendo de la parte visual, siempre impecable y adaptada
a la historia sino que además demuestra, tamáticamente,
un lado polifacético y atrevido que se hace difícil de
encontrar entre tanto paquete comercial. Por ello su cine es un hallazgo
y un alivio para los ojos ávidos del buen séptimo arte.
Imperdible!