FICHA
TÉCNICA DE 'PROMESAS DEL ESTE'
+ Dirección: David
Cronenberg.
+ País: Reino Unido, Canadá
y USA.
+ Año: 2007.
+ Duración: 100 min.
+ Género: Drama, thriller.
+ Interpretación: Viggo Mortensen
(Nikolai Luzhin), Naomi Watts (Anna Khitrova), Vincent Cassel (Kirill),
Armin Mueller-Stahl (Semyon), Sinéad Cusack (Helen), Jerzy Skolimowski
(Stepan).
+ Guión:Steve Knight.
+ Producción: Paul Webster
y Robert Lantos.
+ Fotografía: Peter Suschitzky.
+ Montaje: Ronald Sanders.
+ Diseño de Producción:
Carol Spier.
+ Música: Howard Shore.
+ Vestuario: Denise Cronenberg.
El
canadiense, David Cronenberg, ha demostrado a lo largo de su carrera
que lo suyo es definitivamente cine de autor. Con películas
en su haber que marcaron pauta como ‘Cromosoma 3’
(1979), ‘La Mosca’ (1986), 'Crash’
(1996), ‘Exitenz’ (1999) ‘Spider’
(2002), ‘Una Historia de Violencia’ (2005) por
solo citar algunas, este creativo no solo es un maestro de la cámara,
generando fotogramas que se pegan nuestra retina, sino que es así
mismo un genio recreando ambientes cargados de una tensión
sutil que no se desnuda sino que se incita atrapando al espectador
irremediablemente. ‘Promesas del Este’ (Eastern
Promises, 2007), es un film magistral, que logra mostrarnos con naturalidad
la violencia inherente a la mafia rusa al mismo tiempo que se adentra
en la psicología de los ricos personajes que pueblan esta historia.
Sin duda una película de cita obligada para los cinéfilos,
que podrán comprobar que este director es sinónimo del
cine que nos toca la fibra más intima, dejándonos hambrientos
por más.
Cronenberg fue uno de los principales creadores de lo que se ha denominado
horror corporal, el cual explora los miedos humanos ante la transformación
corporal y la infección. En sus películas, lo psicológico
era típicamente mezclado con lo físico, un ejemplo obligado
es su brillante film ‘La Mosca’. En la primera
mitad de su carrera exploró estos temas principalmente a través
del terror y la ciencia ficción, aunque su trabajo hace tiempo
se ha extendido más allá de estos géneros, demostrando
que se trata de un cineasta en constante evolución. Con producciones
de corte independiente, este canadiense no se ha casado con Hollywood,
e inclusive en su penúltima película ‘Una Historia
de Violencia’ de mayor presupuesto, no hizo concesiones planteándonos
una historia cruda e imposible de olvidar.
En ‘Promesas del Este’,
demuestra nuevamente que se trata e un realizador de lujo, con una dirección
brillante, excelente elenco, un destacado Viggo Mortensen, quien nos
brinda una actuación intensa, pulida y cuidadosamente interpretada,
el producto final es una cinta excelente que nos vuelve a llamar la
atención al tema de la violencia, desde el lado más crudo
hasta el más íntimo, llegando a replantearla éticamente,
continuando con la premisa de su film anterior ‘Una Historia
de Violencia’, que ahonda en los límites del ser humano
frente al bien y el mal, y se pregunta cuál es el tope donde
la violencia es correcta, y deja al aire preguntas como ¿Hasta
dónde moralmente es aceptada? ¿Depende del contexto o
las circunstancias? ¿Hay acaso malos buenos? ¿Existen
justificaciones que la validen humanamente?...
La película toma la historia
de Anna Khitrova,( Naomi Watts) una comadrona, que trabaja en un hospital
al este de Londres, a cuya emergencia llega una jovencita rusa embarazada
que muere en la cesárea, pero que deja entre sus pertenencias
un diario escrito en ruso, que Anna rescata para buscar a la familia
de la pequeña recién nacida. Una tarjeta la lleva a conocer
a Semyon (un soberbio Armin Mueller Stahl) el encantador dueño
de un caro restaurante ruso que esconde una naturaleza brutal y fría
detrás de su sonrisa ya que en realidad pertenece a la hermandad
mafiosa Vory V Zakone. Así mismo tendrá su primer encuentro
con el enigmático chofer de la familia, Nikolai Luzhin, (Viggo
Mortensen) quien se sentirá atraído por la decidida Anna
y con Kirill (Vincent Cassel), el descontrolado hijo de Semyon. A medida
que se va traduciendo el diario, un mundo de horror que viven las adolescentes
rusas, convertidas en prostitutas y adictas a la heroína, se
va revelando en el testimonio de la difunta madre. La mafia que se esconde
detrás de este negocio, presos de la ira, se propondrán
recuperar el diario y no dejar testigos para lo cual recuren al leal
chofer Nikolai, pero este último se debatirá entre su
amor y su ambición, a la vez que esconde profundos secretos que
a nadie puede revelar.
Más allá del crimen y
la mafia rusa, este film nos adentra en los aspectos desconcertantes
de la naturaleza humana, a través de una historia absorbente,
un guión sólido de Steven Knight, que junto a la eficaz
dirección de Cronenberg conforman una mezcla entre lo sentimental
y lo cruelmente real, traducido en una danza de imágenes cargadas
de tensión emocional. A la vez el film sirve de denuncia a la
industria británica del tráfico sexual y plasma de forma
realista a la mafia rusa envuelta en el negocio.
En cuanto a el trabajo de Viggo Mortensen,
el cual se preparo duramente para el papel, trasladándose a Rusia,
yendo al cine, viendo la televisión, entrevistándose con
gente y poniendo a prueba sus conocimientos del idioma, del cual ya
había tomado clases, no podemos sino quitarnos el sombrero frente
a una interpretación genial, muy genuina, que destaca dentro
de un elenco excelente: la correcta Naomi Watts, Vincent Cassel haciendo
unos de los papeles más ricos de su carrera y el impactante Armin
Mueller Stahl, como el supuesto abuelito que esconde una naturaleza
tenebrosa. Se trata, de un film impecable, atrevido que con una destacada
dirección de actores se mete bajo la piel por su intensidad.
David Cronenberg, se ha ganado su puesto
entre los directores más prometedores de las últimas dos
décadas, primero con su cine fantástico y el horror corporal,
hasta pulir su lenguaje, siendo menos explícito, pero planteándonos
los mismos temas de la degeneración humana, la degradación,
el cambio, la mutación, ahondando en los misterios de la condición
del ser.
Su cine, irremediablemente deja huella en nuestras conciencias, desafía
nuestros valores, a la vez que nos transporta a oras realidades. Se
trata de verdadero séptimo arte, ese que confronta al espectador,
dejándolo lleno de interrogantes sin dar moralistas respuestas.
Un cineasta con indiscutible sello propio, cuya obra quedará
como referente en la historia de la cinematografía.
Imperdible!
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