A pesar de mis simpatías o antipatías,
no he querido publicar este texto hasta pasadas las elecciones, para
no influir y sobre todo para no contribuir a la cochambre. Lo redacté
en gran parte hace unos días, en plena campaña de las
elecciones municipales, y como es costumbre, el hedor ha sido insoportable.
Normalmente me mantengo al margen de
la política, la considero una actividad humana en decadencia
moral. Por ello, creo que la cultura debe huir de ella, ignorarla si
no quiere ser contaminada. Pero hay ocasiones en los que la hipocresía
raya cotas intolerables.
Este es un ejemplo cualquiera, ni el
más grave, ni el más representativo. Es un tema puntual
y local, que afecta a un ámbito ‘menor’ como es la
cultura, pero que retrata perfectamente a nuestra clase política,
de cualquier color (y me temo de cualquier lugar), capaz de malograr
el mejor proyecto con tal de robarle protagonismo a su rival.
El
pasado viernes 18 de marzo, me sorprendió una noticia aparecida
en el Diario Sur, un medio de prensa local con gran difusión
en la ciudad. El titular indicaba ‘Marisa Bustinduy pasa al ataque
y acusa de plagio a De la Torre’. La candidata del PSOE aseguraba
que el Partido Popular les había robado la idea de presentar
a Málaga como capital europea de la cultura. En la foto que acompaña
a la noticia, aparecía, junto a la citada candidata, la número
cinco de la lista, Mariluz Reguero, ambas posando en el teatro romano,
con esa naturalidad característica del gremio.
Fue como una bofetada a la verdad. Solté el periódico
bruscamente sobre la mesa y con las vísceras todavía revueltas
tome la pluma y un papel. Me sentí obligado.
Desconozco si el ‘robo’
se produjo una oscura noche de tormenta o si el alcalde, el Sr. De la
Torre, portaba un antifaz. Pero principalmente dudo, dudo muy seriamente,
que les hurtaran la iniciativa, como asegura la Sra. Bustinduy
Entre otras cosas porque su compañera en la foto, la que enseña
dientes con naturalidad, Mariluz Reguero estaba y está total
y manifiestamente en contra de la capitalidad cultural. Que por otra
parte, es una postura respetable.
Si Reguero en su reciente etapa como directora de la Fundación
Picasso rechazó varios proyectos por apoyar la capitalidad cultural
de Málaga, aceptándolos una vez omitido ese objetivo,
por ‘recomendación’ suya. Entonces que hace ahora
apoyando la esperpéntica denuncia. Ya que no se les puede pedir
que sean honrados, sean ustedes mínimamente coherentes.
Visto los resultados electorales en Málaga, nada positivos para
la candidatura de PSOE, creo que está lista ha caducado. Ahora
empezarán las justificaciones, algún que otro llanto (los
menos, ya que todos ganan), y la vida sigue. Caerán unas cuantas
cabezas políticas, y los restantes sobrevivirán agarrados
a su sillón haciendo ‘oposición’ a un gobierno
del PP con mayoría absoluta, otra vez.
Pero les recomiendo, es una opinión, si quieren que la ciudad
tenga un gobierno progresista alguna vez, no vuelvan a reclutar personajes
innombrables. Desconozco quien hace las listas de candidatos, pero en
esta ocasión se han lucido. La número cinco del PSOE ha
hecho que muchos votantes de izquierdas hayan dado plantón a
su cita con las urnas.