El
artista valenciano Rodolfo Navarro cubrirá más
de mil metros cuadrados de la Gran Muralla china con una obra
que integra el espacio monumental con la pintura contemporánea.
El proyecto, se expondrá en junio de 2007 y lleva por
título ‘Interior... ...Externo’.
El
cuadro tendrá una superficie aproximada de 1028 m2, es
decir 176 metros de largo por 7/8 de alto. La obra estará
realizada en varias capas de papel unidas entre sí mediante
cola y otros ingredientes. La pintura será acrílica,
tratada como una gran acuarela, donde el pigmento queda incrustado
en la celulosa del papel cuando éste está mojado.
El papel definitivo se colocará sobre una estructura
de paneles de madera.
Según
el propio artista, Un cuadro de 1000 m2 es un mensaje a todo
aquel que se pasee durante esos días por la Gran Muralla.
Un mensaje al mundo y un nuevo reto expositivo. La Gran Muralla
China es la única construcción humana que se puede
apreciar desde el espacio, una construcción titánica
de una geometría dura y cortante, sus paredes grises
de miles y miles de ladrillos perderán sus significados
para pasar a ser juego compositivo para el artista. Con la realización
de este inmenso cuadro en Junio de 2007, se habrá culminado
una etapa de intensa unión entre el mensaje y el lugar
donde éste se tiene que exponer.
El
proyecto se ubicará en una de las más famosas
puertas o accesos, el paso Juyongguan. La elección de
este diminuto espacio de la Gran Muralla China no se hace al
azar. Es el más famoso tramo de la Muralla de toda China,
es la puerta de su capital, el gran acceso a Beijing. Fue construido
en 1370 para repeler los ataques de las fuerzas Mongolas y ha
sido el paso para millones de personas durante siglos. Para
Rodolfo Navarro colocar un cuadro de 1000 m2 en su superficie
supone un éxito en la Interacción Plástica,
un reto técnico en la realización y exposición
de una obra de tales dimensiones y un sueño único.