El
gobierno de la provincia italiana de Trento ha restaurado y
convertirá en sala-museo dedicado a Juan Pablo II, parte
del refugio de montaña situado en esa región,
y que fue visitado por el Papa en 1984 y 1988.
El director general de la presidencia de la Provincia Autónoma
de Trento, Dino Leonese, señaló que la cabaña
se encuentra en el Monte Adamello, de 3539 metros de altura.
En dicho refugio, Juan Pablo II celebró en 1984 una misa
en honor a los ‘caídos’ en la montaña
y en 1988 regresó para bendecir una enorme cruz que se
erige sobre la punta de dicho cerro que, desde el 31 de diciembre
de 1999, es llamada ‘cumbre Juan Pablo II’.
Leonese explicó que en honor a esas visitas del Pontífice
se restauró el lugar y se dedicó una sala en la
cual se expondrán una serie de propuestas culturales.
También declaró que ‘es un orgullo llevar
a cabo este homenaje, se trata del único refugio de montaña
donde durmió un Papa en la historia’, y agregó
que esta sala-museo recogerá recuerdos y será
sede de encuentros para la reflexión de temas de gran
actualidad.
Leonese señaló que la fecha propuesta para su
inauguración es el 8 de julio de 2007, ocasión
en la cual se organizará junto a la Conferencia Episcopal
Italiana un peregrinaje al Adamello, que convocará a
jóvenes de toda Europa.
Juan Pablo II se distinguió por tener una gran afición
por el alpinismo, visitó el Monte Blanco, el más
alto del viejo continente, además de que realizó
numerosas caminatas veraniegas a través de las montañas
en las regiones de Valle d’Aosta o Cadore.