Varios
monumentos de los 21 preseleccionados para obtener el título
que estaban semanas antes entre los favoritos no llegaron a
los primeros lugares, como las estatuas de la isla de Pascua,
en Chile, la Acrópolis de Atenas o la Alhambra de Granada.
La ceremonia presentada por el actor británico Ben Kingsley
y la actriz india Aishwarya Rai, Miss Mundo 1994, a los que
al final se sumó la estadounidense Hillary Swank. Una
serie de famosos, integrada por el astronauta Neil Armstrong,
el futbolista portugués Cristiano Ronaldo y el ex director
español de la UNESCO Federico Mayor Zaragoza, se turnó
en la tarea de anunciar los nombres de los monumentos ganadores.
Todos estaban en la lista de los más votados difundida
por los organizadores hace un mes salvo el Corcovado de Río
de Janeiro, que experimentó un aluvión de votos
en las últimas semanas. Latinoamérica, donde el
concurso había despertado una gran expectación,
logró que tres de sus monumentos más emblemáticos
pasen a la lista del patrimonio más valorado por la humanidad.
Los 21 países que aspiraban a que sus momentos engrosaran
la lista de maravillas enviaron a Lisboa delegaciones oficiales,
muchas integradas por miembros del gobierno y alcaldes, que
en el caso de los siete seleccionados fueron las encargadas
de subir al escenario a testimoniar la elección.
La idea de las nuevas siete maravillas nació en 1999,
Bernard Weber aventurero, aviador y productor de documentales,
quería reemplazar la lista que dieron a conocer los historiadores
y poetas griegos unos 200 años antes de Cristo, cuyos
monumentos, a excepción de las pirámides de Giza
fueron destruidos en su mayoría por cataclismos. Eran
el faro de Alejandría, el templo de Artemisa, la estatua
de Zeus, el Coloso de Rodas, los jardines colgantes de Babilonia
y el Mausoleo de Halicarnaso.
Las siete nuevas maravillas, después del recuento de
todas las votaciones, son:
La Gran Muralla (China): erigida por el emperador
Qin con la intención de unir los diferentes puntos de
defensa de China y crear una barrera efectiva contra la invasión
mongola. Se construyó entre el siglo V a.C. y el año
1368. Tiene una longitud de 6.700 kilómetros y abarca
siete provincias.
Petra (Jordania): capital del imperio nabateo
se encuentra a unos 250 kilómetros al sur del Amman y
fue reconocida Patrimonio de la Humanidad en 1985. Aunque su
importancia era reconocida desde el siglo III a.C., su esplendor
llegó con el rey Aretas IV (9 a.C. - 40 d.C.).
El Cristo Redentor (Brasil): o Cristo del Corcovado,
fue una iniciativa de la Iglesia Católica con ocasión
del centenario de la Independencia de Brasil en 1922. No obstante
el famoso Corcovado, un proyecto del ingeniero Heitor da Silva
Costa, no fue inaugurado hasta el 12 de octubre de 1931.
Machu Picchu (Perú): construido por
los incas en el siglo XV. Se trata de un santuario de rango
superior en el que se guardaba la momia del fundador del imperio
inca, Pachacútec. Es un conjunto de palacios y templos,
algunos de los cuales estaban recubiertos con oro, que llegó
a albergar hasta 750 personas.
Chichén Itzá (México):
centro político y económico de la civilización
maya entre los años 750 y 1.200 d.C., aunque se estima
que fue construida entre los años 435 y 455 d.C. Su edificio
más destacado es conocido como ‘El castillo’
y se trata de la pirámide dedicada al dios Kukulkán,
que mide 25 metros de alto y 55,5 por cada uno de sus lados.
El Coliseo de Roma (Italia): o Anfiteatro Flavio.
Su construcción empezó en el año 72 d.C.
por orden de Vespasiano y se inauguró en el 80, bajo
el mandato de Tito. Tiene 48 metros de altura, 188 metros de
largo y 156 metros de ancho. Cada nivel tiene 80 arcos.
Taj Mahal (la India): un inmenso mausoleo construido
por Shah Jahan, el quinto emperador mogol musulmán, en
memoria de su esposa, la princesa Mumtaz Mahal, muerta en el
parto de su decimocuarto hijo. Fue erigido entre los años
1631 y 1648, y en él trabajaron 20.000 personas, que
vivían en un complejo cercano llamado Mumtabazad, conocido
ahora como Taj Ganj.