La
capilla ardiente del escritor ha quedado instalada por la mañana
en el mismo hospital, donde le velan su viuda, María
España, familiares, y amigos, además de figuras
del mundo de la cultura y la política, en la más
estricta intimidad.
El féretro se trasladará mañana a las 9.30
de la mañana para ser incinerado en el crematorio de
La Almudena (Madrid). Fuentes de la familia indicaron que las
cenizas reposarán en dicho cementerio junto a su hijo,
que murió a los seis años y al que dedicó
su libro 'Mortal y rosa'.
Sus gafas de pasta, bufanda blanca al cuello y aire bohemio
le daban una imagen carismática que, unida a una fuerte
personalidad y voz profunda, le hicieron muy conocido entre
el público. Umbral dio sus primeros pasos como periodista
en 'El Norte de Castilla', dirigido por Miguel Delibes, donde
comenzó a escribir en 1958. Tras su llegada a Madrid,
a principios de los 60, empezó a colaborar en 'La estafeta
literaria' y 'Mundo Hispánico'. Después también
colaboró con 'El País' y 'Diario 16'.
El autor madrileño ha sido una de las figuras literarias
más relevantes de España en las últimas
décadas, con numerosos reconocimientos, entre los que
destacan el Premio Príncipe de Asturias de las Letras
en 1996, el Premio Cervantes de 2000 y Mesonero Romanos de Periodismo
en 2003. Actualmente escribía en EL MUNDO sus crónicas
'Los placeres y los días' de lunes a sábado. Su
colaboración con este diario se inició en 1990.
Su última columna, titulada 'Eugenio
d'Ors', fue publicada exactamente hace un mes, el
28 de julio de 2007.
La salud de Umbral se había resentido en 2003. En agosto
de ese año, fue hospitalizado por una neumonía
derivada de una operación intestinal. El mes anterior
le había sido extirpada una parte del colon. Como ya
dijo él mismo, 'El presente es todo mío y moriré
en presente', frase de 'Un ser de lejanías', un título
publicado en 2001 y en el que dejaba ver algunos de sus aspectos
más íntimos.
Entre sus más de 80 libros publicados, destacan 'Las
ninfas' (1975), 'Mortal y rosa' (1975), 'La noche que llegué
al Café Gijón' (1977), 'Trilogía de Madrid'
(1984), 'Madrid 1940: Memorias de un joven fascista' (1993)
y 'El socialista sentimental' (1999). Sus últimos han
sido 'Madrid, tribu urbana' (2000); 'Un ser de lejanías'
(2001); '¿Y cómo eran las ligas de Madame Bovary?'
(2003); 'Los metales nocturnos' (2003); y 'Días felices
en Argüelles' (2005). En marzo de 2007, presentó
una obra teñida de cierto matiz melancólico, 'Amado
siglo XX' publicado por Planeta, donde el escritor hacía
balance de su vida y de todo un siglo, mezclando memoria y literatura.
Umbral que nació el 11 de mayo de 1935 en Madrid pasó
toda su infancia y adolescencia en Valladolid. Allí comenzó
su pasión por la lectura, el centro de su vida y de la
que aprendió de forma autodidacta. Sólo estuvo
en un centro de enseñanza desde los 10 a los 11 años,
de allí lo echaron y nunca más volvió.
Así era el genial escritor que ha fallecido mucho antes
de lo que le correspondía, pero que sin duda ha dejado
un impresionante legado para las generaciones futuras.