Wang, que debe su nombre de
pila a la adoración que sentía su padre por el
actor John Wayne, recurre al humor y la ternura en 'Mil años
de oración', para esbozar la historia de un viudo de
Pekín que viaja a Estados Unidos para ayudar a su hija
recién divorciada, con la que ya no se entiende.
El director ha alternado grandes producciones de Hollywood como
'El club de la buena estrella' (1993), 'Sucedió en Manhattan'
(2002) y 'Last Holiday' (2006), con otras más pequeñas
e independientes, como 'Smoke' (1995), o 'Blue in the Face'
(1995).
Blanca Portillo protagoniza junto a Maribel Verdú la
película española 'Siete mesas de billar francés',
de Gracia Querejeta, que también obtuvo el premio al
mejor guión, compartido con la estadounidense 'Honeydripper',
de John Sayles.
La Concha de Plata al mejor actor ha sido para Henry O, también
por la película de Wayne Wang y otra Concha de Plata,
la de mejor director, recayó en Nick Broomfield, por
la británica 'La batalla de Haditha'.
La iraní 'Buda explotó por vergüenza', de
Hana Makhmalbaf, recibió el Premio Especial del jurado
que presidió en esta edición el escritor Paul
Auster.
El Premio del jurado a la mejor fotografía ha recaído
en Charlie Lam por ‘Ceot oi kap gei / exodus’ (Hong-Kong).
La película uruguaya ‘El baño del Papa’
dirigida por Enrique Fernández y César Charlone
ganó el premio Horizontes de la sección Horizontes
Latinos de San Sebastián. Se trata de una historia sobre
una pequeña ciudad que va a recibir la visita del Papa,
ante lo cual sus habitantes piensan en como hacer dinero con
los peregrinos: Beto decidirá construir un baño
frente a su casa y alquilar el servicio.
El jurado decidió además conceder dos menciones
especiales a las películas mexicana ‘Párpados
azules’ de Ernesto Contreras y la colombiana ‘Satanás’
de Andrés Baiz.
