Este
premio, que concede el Ministerio de Cultura, está dotado
con más de 90.000 euros. Además, incluye la organización
de una exposición en el Reina Sofía (aunque en
esta ocasión, se da la circunstancia de que ya está
prevista para el mes de junio una muestra con 80 obras elegidas
por el propio artista que cubren todas sus etapas creativas,
en este museo) y permite al ganador elegir a otro artista menor
de 35 años como receptor de la beca Velázquez.
El jurado, presidido por Ramón González de Amezúa,
director de la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando,
decidió por unanimidad otorgar el premio a Luis Gordillo,
al que considera como ‘uno de los pioneros en la recuperación
de la figuración y el color’.
Este galardón, que pretende convertirse en el Cervantes
de las artes plásticas, fue instituido en 2002, año
en que recayó en el pintor y poeta murciano Ramón
Gaya, y el año pasado fue otorgado al pintor y escultor
manchego Antonio López. También han sido distinguidos
con este premio el artista catalán Antoni Tápies,
el pintor y escultor madrileño Pablo Palazuelo y el pintor
mexicano Juan Soriano, fallecido poco después.
Luis Gordillo es un artista que asimila presupuestos del arte
pop internacional ‘convirtiéndose en el introductor
de este lenguaje en la escena artística española’,
señala el fallo. Según el pintor sevillanao el
mundo de la pintura se divide entre lo que él llama pintura-pintada
‘y toda esa otra cosa que se engloba bajo el nombre de
artes plásticas: instalaciones, vídeos, performances,
arte en la Red’. Ayer, nada más conocer que había
recibido el Premio, quiso volver a reivindicar el papel protagonista
que él siempre ha dado a la pintura y que considera que
debe de tener en el mundo del arte.
Entre los premios que atesora esta artista se encuentran, Medalla
de Oro de las Bellas Artes de Madrid, 1996; Premio de la CEOE
a las Artes Plásticas, 1993; Premio de la Comunidad de
Madrid a la Creación Plástica, 1992; Premio Andalucía
de Artes Plásticas, 1991 o Premio Nacional de Artes Plásticas,
1981.