Para
conmemorar el Día Internacional del Libro, bajo el lema
Y la ciudad amaneció llena de libros (día
internacional del libro 2008), la mañana del domingo
del 27 de abril de 2008, se pone en marcha una nueva fase del
proyecto Biblioteca Errante. Libros viajeros por Málaga
(www.bibliotecaerrante.es).
Un proyecto iniciado en 2006 por la joven empresa malagueña
SUMA Gestión Cultural para fomentar la lectura y estimular
la cultura en Málaga. Los organizadores declaran que
‘trabajamos para dinamizar la vida cultural de la capital,
tiñendo las calles de páginas impresas, para que
los ciudadanos aprecien, valoren y disfruten de la cultura,
a través de los libros, de la lectura’.
En esta ocasión, un millar de libros tomarán las
calles de la capital malagueña. A las diez de la mañana
más de mil volúmenes florecerán alrededor
de la escultura de Christian Andersen. Montañas de libros
dispuestos de una forma orgánica, a modo de instalación
efímera, para que los transeúntes tomen los libros
y comience nuevamente el ciclo de la Biblioteca Errante.
Tal y como nos cuenta Marc Montijano, uno de los artífices
del proyecto, ‘el montaje será visualmente muy
espectacular, debido al gran número de libros que pondremos
en la calle, pero el objetivo es el mismo que en ocasiones anteriores,
apostar por la cultura, por la ciudad y a poyar a Málaga
2016. Nosotros creemos en el esfuerzo y el trabajo, y apostamos
firmemente por la capitalidad de Málaga como ciudad cultural
europea de 2016’. También quiere dejar patente
el ‘agradecimiento a la Consejería de Cultura de
la Junta de Andalucía, por la generosa donación
que han efectuado a la Biblioteca Errante, de más
de 1148 volúmenes, que ha supuesto un gran impulso para
el proyecto. Un apoyo que junto a las donaciones de libros de
particulares, hace que este sueño cultural de cambio
que hemos emprendido sea cada día una realidad más
fuerte’.
Esta iniciativa está emparentada con el fenómeno
mundial del Book Crossing, pero con una finalidad más
social y educadora, enfocada en un ámbito geográfico
concreto. Pretendemos crear una costumbre o un hábito
social característico de la ciudad. Una seña de
identidad de Málaga que con el tiempo puede ser incluso
un atractivo o reclamo turístico más. Sin duda,
si se logra, será un síntoma de una buena salud
cultural.