El valioso instrumento es uno
de los sesenta violonchelos que existen en el mundo procedente
de las manos de Stradivari.
El violonchelo es conocido como el ‘Fleming’ porque
su última propietaria fue la fallecida violonchelista
británica Amaryllis Fleming, hermanastra del creador
de James Bond, Ian Fleming e hija del pintor británico
Augustus John.
Según Jason Price, de Tarisio, empresa dedicada a la
subasta de instrumentos musicales en Nueva York, la venta ha
generado ya un enorme interés aunque difícilmente
un músico particular va a poder permitirse su compra,
‘apostamos más bien por la posibilidad de que un
grupo inversor o un supermillonario decida comprar el instrumento
para prestarlo luego a músicos de talento’.
Amaryllis Fleming, fallecida en 1999, fue una de las más
destacadas intérpretes europeas del violonchelo en los
años cincuenta y sesenta y fue además profesora
del Royal College of Music, institución docente a la
que irá el dinero que se obtenga de la subasta.
El violonchelo más caro del mundo es otro Stradivarius
conocido como el Bonjour, que se vendió en Christie's
en 1999 por 710.000 euros. Otros son el Davidov, del que es
propietario el músico Yo-Yo Ma, y el Duport,
que perteneció al fallecido maestro ruso del violonchelo
Mstislav Rostropovich.
El Fleming, fabricado en Cremona (norte de Italia)
en 1717 sufrió algunos daños en sus primeros años,
probablemente a mediados de ese siglo en Madrid, fue restaurado
por el español José Contreras, el más reputado
especialista de su tiempo. El Stradivarius viajó, según
se cree, a Gran Bretaña durante las guerras napoleónicas
y en 1893 fue vendido a Emil Hanna, un conocido marchante alemán,
tras lo cual cambió varias veces de manos hasta que llegó,
tras sobrevivir a la Segunda Guerra Mundial, a las del doctor
Pistor, un coleccionista alemán establecido en Leipzig.
En 1962, Paul Rosenbaum, íntimo amigo de Amayllis Fleming,
organizó la venta de los instrumentos de la colección
de Pistor y cedió el Stradivarius a la violonchelista.