El santuario, que data de la
primera mitad del siglo II d.C., fue descubierto de modo accidental,
durante la construcción de un hotel en el centro de la
localidad, según informo a la prensa el director adjunto
del Museo Nacional de la Unión de Alba Julia, Constantin
Inel.
Explicó que los especialistas tenían indicios
de la existencia de un templo de Mitras después de que
en 1921, mientras se levantaba una gran catedral ortodoxa, se
encontrara un santuario dedicado a este dios y 40 placas votivas.
El arqueólogo destacó que se conservaron en muy
buen estado los muros, una inscripción dedicada a Mitras
y otras dos dedicadas a los tradicionales acompañantes
del dios, junto a unos altares de piedra, además de una
sala sin ventanas donde se supone que se celebraba la misteriosa
ceremonia de iniciación.
Las investigaciones continuarán hasta excavar todo el
templo, que será conservado in situ, en el sótano
del hotel, y que será el primer templo de Mitras que
se podrá visitar en Rumanía.
Mitra era el dios de la luz solar, de origen persa cuyo culto
se extendió en el Imperio Romano a través de Asia
Menor, sobre todo a partir del siglo I d.C.
Se conservan diversas esculturas, en su mayor parte del siglo
II. Se le representa como un hombre joven, con un gorro frigio,
matando con sus manos un toro de cuya sangre fluye vida eterna.