El escritor que tenía
83 años, ambientaba sus novelas negras entre los indios
del sudoeste de Estados Unidos. Sus 'thrillers' en torno a los
policías navajos Jim Chee y Joe Leaphorn se tradujeron
a 17 lenguas. En la serie titulada 'The Navajo Mysteries', destacan
'The blessing way' (1970), 'The dance hall of the dead' (1973),
'Listening woman' (1978) y 'People of Darkness' (1980), entre
otras.
Como subrayó varias veces, Hillerman quería lograr
comprensión y atención para la cultura de los
indios americanos entre los lectores. Por eso, en sus novelas
también describía sus creencias y sus rituales.
'Siempre me preocupó que los estadounidenses no tuvieran
ni idea de la cultura india', dijo una vez a la revista 'Publishers
Weekly'.
Hillerman de ascendencia alemana e inglesa, creció como
hijo de un granjero en el pequeño pueblo de Sacred Herat,
parece ser que se crió entre indios de origen seminola
en su Oklahoma natal. Gracias a su estrecho contacto con líderes
tribales estaba bien informado sobre los ritos de navajos, hopis
y zunis.
Con 'The Blessing Way', el ex periodista inició su serie
de en total 18 novelas. En ellas, Leaphorn encarna al policía
experimentado, que actúa de forma racional, mientras
que el joven Chee realiza su trabajo en consonancia con la naturaleza
y las tradiciones de los indios.
Hillerman fue distinguido por su trabajo, entre otros, con el
Premio Edgar Allan Poe de la Asociación de Escritores
de Novela Negra de Estados Unidos, Premio Grand Master, Gran
Prix de la Littérature Policière de Francia, Premio
al Amigo Especial de la Tribu Navajo (Navajo Tribe's Special
Friend), Premio del Center for the American Indian's Ambassador,
así como con el Agatha Award por sus memorias, 'Seldom
Disappointed',
Hillerman fue una prueba de la universalización de la
novela negra. Su pasión por las culturas indias le llevó
a ser considerado como el instaurador de una nueva corriente,
denominada novela policíaca de las minorías indígenas
de los USA.