A la XXVI edición de
este premio, dotado con 18.000 euros, han concurrido un total
de 244 novelas, 43 más que en 2007. El finalista de este
año ha sido el peruano Iván Thays por su obra
‘Un lugar llamado Oreja de Perro’, un relato introspectivo
protagonizado por un hombre que acaba de perder a su hijo de
cinco años y que ve cómo se rompe su matrimonio.
Daniel Sada (Mexicali, México, 1953), a quien el fallecido
Roberto Bolaño admiraba y había calificado de
autor barroco, a la misma altura que Lezama Lima, ha mostrado
su satisfacción por haber obtenido esta edición
del Herralde de novela. ‘Es como recibir un frasco de
vitaminas’, ha dicho, con una obra, de tintes autobiográficos
en la que narra, sin olvidarse del humor, las relaciones amorosas
entre un hombre y dos mujeres. ‘Quería escribir
una novela cercana al pudor exacerbado, donde el deseo creciera
y se engrandeciera, con un contrapunto de perversión
inaudito. Y manejarme en esos dos extremos, sin que el nivel
de intriga decreciera’.
También el humor incide en el argumento y, según
Sada, ‘tiene que tener un desarrollo dramático
para que sea eficaz, no sólo debe ser a base de chascarrillos’.
Respecto al hecho de que se le haya calificado de hombre-novela
y de barroco, el escritor ha señalado que ‘hago
un tipo de literatura no muy acorde con los tiempos actuales,
interesándome mucho la cadencia en la prosa’.
Periodista de formación, aunque apenas ha ejercido, Daniel
Sada ha escrito otros 15 libros, uno de ellos trasladado al
cine (Una de dos, 1996), y ha ganado varios premios en su país.
Por su parte, Iván Thays, conocido en el ámbito
literario por una de las bitácoras más completas
que hay en la red sobre literatura hispanoamericana, ha tardado
ocho años en construir ‘Un lugar llamado Oreja
de Perro’, en el que cruza las reflexiones del protagonista,
un periodista destinado a una destruida ciudad andina, con los
acontecimientos ocurridos en Perú a raíz del gobierno
de Fujimori.
Thays, de 40 años y que fue elegido el año pasado
como uno de los 39 mejores escritores latinoamericanos jóvenes
en Bogotá, ha dicho que empezó la obra cuando
todavía era joven, reiniciándola y dándole
una nueva forma cuando se divorció y su ex-esposa se
llevó con ella a su hijo.
El jurado de este galardón literario estaba formado en
esta ocasión por Salvador Clotas, Juan Cueto, Luis Magrinyà,
Enrique Vila-Matas y el editor Jorge Herralde.