Los cuadros de 1 x 1 metros,
fueron realizados por Warhol entre 1977 y 1979 y, en su mayoría,
representan a atletas famosos como Muhammad Ali, Kareem Abdul-Jabbar
u O.J. Simpson.
El robo de las obras fue descubierto por la empleada doméstica
de Weisman el pasado 3 de septiembre, un día después
de que éste saliera de viaje. Cuando entró en
casa, ninguna de las puertas de la mansión había
sido forzada, según ha hecho saber la policía,
y se dirigió al salón se dio cuenta de que las
paredes estaban algo vacías, aunque curiosamente los
únicos cuadros que faltaban eran los retratos de la serie
Los atletas. Las múltiples obras de arte que decoran
la casa de uno de los principales coleccionistas de Los Ángeles
seguían en su sitio por lo que hace pensar que los ladrones
actuaron por encargo.
Weisman encargó las pinturas a finales de la década
de 1970, cuando el artista produjo cientos de obras para quienes
podían abonar la cifra de 25.000 dólares que cobraba
por cada obra.
El propietario, Richard Weisman, ha ofrecido una recompensa
de un millón de dólares para quien ofrezca información
que ayude a recuperarlos. La ciudad de Los Angeles ya está
llena de estos carteles, donde puede verse once retratos, diez
de estrellas del deporte de los años 70 más el
del propio dueño de la colección, Richard Weisman,
anunciando la recompensa.