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Audrey
Azoulay, la ministra de Cultura francesa, entregó la obra,
un dibujo a carboncillo titulado Trois danseuses en buste, conocido
también como Trois danseuses à mi-corps. La pieza
fue requisada por los nazis el 28 de agosto de 1940 a Maurice
Dreyfus, que en 1947 indicó a las autoridades francesas
que no la había recuperado, al contrario de lo ocurrido
con otros dos pasteles de Carrie Raeburn, que también le
habían sustraído los ocupantes y que sí le
fueron sido restituidos.
Pese a que Trois danseuses en buste fue localizado en 1951 en
un armario del edificio que durante la Segunda Guerra Mundial
fue la embajada alemana en París, y que después
se convirtió en una dependencia del ministerio francés
de Exteriores, no se estableció el vínculo con la
demanda del coleccionista expoliado. Así que ese mismo
año fue depositado en el del Louvre con el número
252 y con la referencia REC 133, de acuerdo con un decreto del
13 de agosto de 1951.
No ha sido hasta el año pasado que el ministerio de Cultura,
ante la evidencia de que la restitución de obras expoliadas
durante la guerra se enfrenta a dificultades tras la desaparición
de los propietarios y de testigos directos, puso en marcha un
protocolo de búsqueda, sin esperar a que los herederos
se manifiesten.
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